Podar nuestras relaciones.

Nuestras relaciones con los demás son un arte que refleja nuestra propia forma de ser con nosotros mismos. Cada persona con la que nos relacionamos ha sido un encuentro hacia una parte de nosotros, y es por eso que muy profundamente cada persona es un espejo nuestro porque refleja y recibe aquello que somos. No es gratuita o fortuita ninguna de nuestras relaciones, cada una nos invita al descubrimiento de nuevas dimensiones de nosotros y por tanto quien tenemos hoy en nuestra vida es porque lo hemos buscado consciente e inconscientemente para una finalidad especial, para un encuentro mucho más profundo, mucho más enriquecedor en nuestro presente. Escogemos a las personas según nuestro nivel de consciencia y de esa forma nuestras relaciones, positivas o negativas reflejan eso que estamos ofreciendo, o eso que estamos quitando, eso que estamos en definitiva; siendo. Tanto tú como yo somos ese Bonsai que hay que podar para embellecer, sacarle lo malo, mantener la orientación fluida de si mismo para dejarlo crecer bajo su propia esencia, pero debemos podar, cuidar y sobre todo, tener en consideración cual es el propósito de nuestra relación. Si no "podamos" nuestras relaciones, somos descuidados con nosotros mismos, ahí la importancia de saber cuando cortar y cuando no. Priorizar si queremos a esta persona en nuestra vida o no, si nos aporta en nuestra felicidad o no, o si nosotros somos o no un aporte para ella. Así, como el Bonsai o el arte de la decoración Ikebana japonesa donde la flor y el arreglo son uno y no cada uno separado del otro, actúan ambos en una unidad para hacer un todo en colaboración juntos hacia la sanidad de la belleza. Si no tenemos el carácter, la sensibilidad y sobre todo la consciencia de que cada relación nos aporta o nos quita no seremos capaces tampoco de trascender nuestra propia relación con nosotros mismos, y para ello, hay que comenzar por podarnos a nosotros, ser nuestro propio Bonsai, nuestro propio Ikebana. De esa forma, sabremos cual relación cortar y cual mantener, cual nos hace feliz y cual no.
Nuestras relaciones presentes definen nuestra relación con nosotros mismos, y si algo no anda bien debemos considerar antes ver qué debemos trabajar en nosotros para tomar parte y trabajar, y si las cosas andan bien entonces disfrutar de ello, y ojalá ir más profundo según la fluidez natural de la relación.
Tú y yo somos un reflejo interior tanto de tu relación contigo y de mi relación conmigo.
Seamos nuestro propio bonsai y veamos qué debemos podar y qué mantener para dejar que el hermoso y diminuto árbol crezca sano, bello pero sobre todo, se vea enorme siendo tan pequeño y humilde.

@Andreas_von