Sufrir

Una vida feliz no es una vida carente de sufrimiento. Sufrir es parte intrínseca del ser humano, sufrir puede llegar a ser tan luminoso como oscuro. Eso es lo que tiene el sufrimiento, que nos lleva a la decisión, a la elección de nuestro estado presente. Si sufres no está mal, porque sientes. Pero por sufrir no nos refugiemos en la mente, creando, evadiendo o simplemente encontrando excusas metafísicas, religiosas o dogmáticas porque quien sufre y elige ser compasivo consigo mismo no estará lejos de una vida feliz, pero quien sufre y no acepta, no conoce ni desea sentir en profundidad, conocer las raíces de su sufrimiento cerrará todo camino a una vida feliz, porque una vida feliz es aquella que no rechaza lo que siente, lo conoce y lo hace propio hasta la trascendencia.


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