domingo, 6 de mayo de 2012

…Y si no es ahora ¿Cuándo?...


Mientras el mundo gira, las sociedades se movilizan, las culturas se nutren y los animales, vegetales y seres humanos se reproducen. Todo gira, avanza, se desarrolla, evoluciona. En el trascurso del tiempo, por miles de años, los hombres hemos seguido la realización de nuestros anhelos más profundos, de aquellos sueños en donde está depositada nuestra felicidad. Así es, mientras nosotros soñamos realizarlos el mundo sigue avanzando en su natural fluir durante millones de años, nacen y mueren personas, hay paz y hay guerra, y así. Todo esto me ha hecho pensar o cuestionar algo que con su respuesta puede parecer un poco fuera de la realidad o de las concepciones de la física y de muchas otras cosas.

¿Qué mueve al mundo en realidad?.

Más allá de las explicaciones netamente científicas o religiosas el movimiento del mundo es una realidad imparable, por lo menos por nosotros los seres humanos. Pero quisiera detenerme en una reflexión más metafísica si pudiera llamársele así. Desde mi experiencia y por ende muy en lo profundo de mi creo que este movimiento de la tierra, este movimiento de la humanidad y de todo lo que le rodea va más allá de una explicación física.
Siento que ese movimiento en medio del tiempo y del espacio lo genera el deseo profundo de una consciencia colectiva, de una energía poderosa ligada al deseo de vivir, de existir. Algunos pueden llamarle a esto Dios, otros pueden llamarle La creación, el universo, etc. Esto del movimiento generado por el deseo de la humanidad para muchos puede parecer una bobada y para otros quizás algo más cercano a sus creencias. Aun así, insisto en intentar olvidar las explicaciones científicas del porqué del movimiento terráqueo y enfocarse al porqué del movimiento del mundo – digo “mundo” entendiendo a la humanidad y la vida en general dentro del planeta tierra – porque más allá de todas esas explicaciones si nos fijamos el ser humano en su afán de vivir impulsa su propio movimiento individual, el de su familia, el de la sociedad, el de los países ¿y por qué no? el del mundo entero. Si nuestros deseos de trascender en la humanidad no existieran quizás este mundo ya no existiría, o aun seríamos unos primates o simplemente considérenme un orate. Pero en mi caso me agrada y más aun, me llena de felicidad sentir que por lo menos mis deseos y anhelos mueven mi mundo y el que me rodea y por lo tanto ¿Por qué no este deseo pueda sumarse al de otros que también busquen lo mismo?.
Creo que muchos no sabemos que tenemos estos mismos deseos que los demás, o quizás si. Pero si nos damos cuenta hay algo, un deseo innato y en común para cada ser humano en este planeta, alcanzar la felicidad. Alcanzar la felicidad en el campo de una realización que le permita desarrollarse como un ser humano integro, y este deseo tan inherente en todos nosotros nos alimenta de una energía indestructible que nos impulsa día a día a encontrar lo que nos hará felices. Así quizás sin saberlo nos alimentamos mutuamente, como una humanidad sin vernos ni sentirnos, pero lo hacemos y así sin darnos cuenta movemos nuestras sociedades y finalmente al mundo entero. Obviamente muchos de estos deseos pueden venir enfermos o con profundo dolor generando también atrocidades en la humanidad, pero bajo la enfermedad – cualquiera que sea – habita siempre la salud, porque siempre que estemos enfermos querremos llegar a sentirnos sanos para poder ser felices plenamente. Es por eso, que desde mi punto de vista, tanto intelectual como empírico, es vital estar sintiendo y anhelando constantemente realizar aquello que nos llama a la felicidad, a encontrar lo que realmente amamos hacer y disfrutar de la realización de esos sueños. Porque ningún sueño o anhelo negativo o destructivo se desea por toda una vida y sólo aquellos deseos que elevan al ser humano a su condición de ser sublime y benevolente están siempre presentes y son justamente esos deseos los que hacen que el mundo se mueva. Sabiendo y sintiendo eso no dejo nunca de hacerme la pregunta que me lleva a realizar mis sueños para aportar al movimiento de la humanidad…


…Y si no es ahora ¿Cuándo?...



@Andreas_von

2 comentarios:

  1. Comparto tu hermosa y elevada visión, es el ideal, pero no hay q olvidar q muchas veces el mundo se mueve por simple supervivencia. No basta con "saber" que hay mas buenos q malos en el mundo, bastaría en hacerlo ahora!

    ResponderEliminar
  2. Así es, no basta con saber, pero saber es el primer paso, comenzar es importante. Ese "ahora" es comenzar.

    ResponderEliminar

Datos personales